Estamos acostumbrados a comer rico y a comer bien, la carne, la variedad de sabores y colores en nuestros platos nunca faltan, por algo se dice que somos la capital gastronómica de América. El pollo a la brasa, el chancho al palo, el arroz con mariscos y el tacacho con cecina forman parte de nuestra abundante carta gastronómica peruana. Y una de nuestras principales características es la creatividad al entrar a la cocina. Hoy presentaremos un plato fusión, a la innovación culinaria, propia de nosotros le agregamos una preparación extranjera que ha rayado en Mistura, fuera pero que mantenga, la caja china y con ella obtendremos: el pollo a la brasa a la caja china.
A lo largo de nuestra historia como país nuestra culinaria se ha visto afectada por muchos factores, aquí tenemos al factor socioeconómico, las migraciones, la geografía, la historia en sí. Compartiremos con ustedes un poco de los orígenes de algunos vocados peruanos que nos parecen interesantes porque como sabrán somos lo que comemos y el que no tiene de inga tiene de mandinga. ;)
El anticucho
La palabra, se dice, que es de origen quechua: “Anti, delante; y cuchu, cortar”, por otro lado el lingüista Noé Lara sostiene que la palabra proviene de “uchu, ají; y anti, ande”. Anteriormente se hacía con carne de llama y al llegar los españoles se cambió a la llama por la carne de res.
La causa
El origen de la causa rellena tiene distintas leyendas. Una de ellas dice que es de origen precolombino y se le denomina así porque papa en quechua se pronuncia “Kausay”, que significa también ustento necesario, vida y alimento, o lo que alimenta. El otro relato sostiene que la causa siempre ha sido limeña y se popularizó después del discurso de José de San Martín "El Perú desde este momento es libre e independiente por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su "causa" que Dios defiende" y por tal frase se le llamó “causa”. Una tercera leyenda cuenta que en 1880, durante la guerra con Chile, las mujeres empezaron a recolectar maíz, alverjas, zanahorias, pero sobre todo papa y prepararon una receta muy parecida a la actual para ponerla en venta con el objetivo de reunir fondos, salían a las calles pregonando “Para la causa, para la causa” y desde ese entonces que se le llama así. Como ven hay muchos posibles orígenes de esta deliciosa receta.
Ahora sabemos que mientras más enigmática la historia, más rico el potaje.
¿Se imagina un pollo a la brasa crujiente por fuera pero que mantenga la suavidad y lo tierno de su preparación a la brasa tradicional? Parece algo lógicamente imposible pero aseguramos que con esta receta lo increíble se hace real. Vamos con la receta:
Ingredientes :
2 pollos enteros, grandes
6 cucharadas de mostaza
12 cucharadas de ajo recién molido
4 cucharadas de romero
De 15 a 20 cucharadas de sal
6 cucharadas de sillao (Salsa de soya)
Orégano
1 cebolla cortada en dos
4 cucharadas de mantequilla
Comino y pimienta al gusto
Preparación:
Primero se calienta el carbón hasta qué esté en punto de brasa. Mezcla la mostaza con ajo molido, romero, sal, pimienta, comino, sillao y orégano. Baña al pollo con este condimento por dentro y fuera de él e introdúcele la mitad de una cebolla en cada pollo y colocarlos dentro de las cajas chinas sobre la parrilla para carnes. Colocar sobre cada pollo los trozos de mantequilla. Tapar la caja por una hora. Abrir la caja, voltear al pollo y asar por una hora más. Listo. Tienes uno de los platos a la caja china más ricos para 8 personas. Provecho!
A lo largo de nuestra historia como país nuestra culinaria se ha visto afectada por muchos factores, aquí tenemos al factor socioeconómico, las migraciones, la geografía, la historia en sí. Compartiremos con ustedes un poco de los orígenes de algunos vocados peruanos que nos parecen interesantes porque como sabrán somos lo que comemos y el que no tiene de inga tiene de mandinga. ;)
El anticucho
La palabra, se dice, que es de origen quechua: “Anti, delante; y cuchu, cortar”, por otro lado el lingüista Noé Lara sostiene que la palabra proviene de “uchu, ají; y anti, ande”. Anteriormente se hacía con carne de llama y al llegar los españoles se cambió a la llama por la carne de res.
La causa
El origen de la causa rellena tiene distintas leyendas. Una de ellas dice que es de origen precolombino y se le denomina así porque papa en quechua se pronuncia “Kausay”, que significa también ustento necesario, vida y alimento, o lo que alimenta. El otro relato sostiene que la causa siempre ha sido limeña y se popularizó después del discurso de José de San Martín "El Perú desde este momento es libre e independiente por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su "causa" que Dios defiende" y por tal frase se le llamó “causa”. Una tercera leyenda cuenta que en 1880, durante la guerra con Chile, las mujeres empezaron a recolectar maíz, alverjas, zanahorias, pero sobre todo papa y prepararon una receta muy parecida a la actual para ponerla en venta con el objetivo de reunir fondos, salían a las calles pregonando “Para la causa, para la causa” y desde ese entonces que se le llama así. Como ven hay muchos posibles orígenes de esta deliciosa receta.
Ahora sabemos que mientras más enigmática la historia, más rico el potaje.
¿Se imagina un pollo a la brasa crujiente por fuera pero que mantenga la suavidad y lo tierno de su preparación a la brasa tradicional? Parece algo lógicamente imposible pero aseguramos que con esta receta lo increíble se hace real. Vamos con la receta:
Ingredientes :
2 pollos enteros, grandes
6 cucharadas de mostaza
12 cucharadas de ajo recién molido
4 cucharadas de romero
De 15 a 20 cucharadas de sal
6 cucharadas de sillao (Salsa de soya)
Orégano
1 cebolla cortada en dos
4 cucharadas de mantequilla
Comino y pimienta al gusto
Preparación:
Primero se calienta el carbón hasta qué esté en punto de brasa. Mezcla la mostaza con ajo molido, romero, sal, pimienta, comino, sillao y orégano. Baña al pollo con este condimento por dentro y fuera de él e introdúcele la mitad de una cebolla en cada pollo y colocarlos dentro de las cajas chinas sobre la parrilla para carnes. Colocar sobre cada pollo los trozos de mantequilla. Tapar la caja por una hora. Abrir la caja, voltear al pollo y asar por una hora más. Listo. Tienes uno de los platos a la caja china más ricos para 8 personas. Provecho!